La familia de jarrones se amplía con esta nueva incorporación protagonizada por un guacamayo de pico y patas doradas. El tratamiento preciosista del ave y el rico detalle de su plumaje se combinan con un vaso de forma depurada. Por otro lado, mientras el ave se decora con colores azules, y verdes metalizados e iridiscentes, el jarrón parte de la porcelana blanca mate, surcada, delicadamente, por líneas geométricas en brillo. Jarrón Guacamayo no es sólo funcional y decorativo, es un llamamiento a la preservación de estas maravillosas, coloridas y divertidas aves, que también se encuentran en riesgo de extinción. Protejamos la vida con el arte.